May
21
DISFUNCIÓN DEL PISO PÉLVICO
¿QUÉ ES LA DISFUNCIÓN DEL PISO PÉLVICO?
Para la mayoría de la gente, el evacuar es una función automática. Para algunos individuos, el proceso de evacuación de heces puede ser muy difícil. Los síntomas de disfunción del piso pélvico incluyen estreñimiento y la sensación de un vaciado incompleto del recto al evacuar. El vaciado incompleto puede hacer sentir al individuo la necesidad de intentar evacuar varias veces en un período corto de tiempo. Heces residuales que permanecen en el recto pueden escurrir lentamente y provocar incontinencia fecal.
El proceso de defecación (evacuación) requiere de un esfuerzo coordinado de diferentes músculos. El piso pélvico está constituido por varios músculos que sostienen al recto como una hamaca. Cuando el individuo quiere evacuar, los músculos del piso pélvico se supone se relajan, permitiendo así que el recto se vacíe. Mientras los músculos del piso pélvico están relajados, los músculos del abdomen se contraen para ayudar a empujar las heces fuera del recto. Individuos con disfunción del piso pélvico, tienden a contraer, en lugar de relajar, los músculos del piso pélvico. Cuando esto sucede durante un intento de evacuación, estos individuos realmente pujan contra una pared muscular inquebrantable.
¿CÓMO SE DEAGNOSTICA LA DISFUNCIÓN DEL PISO PÉLVICO?
El diagnóstico del desorden del piso pélvico comienza con una historia médica cuidadosa en relación con síntomas, problemas médicos y una historia de trauma físico o emocional que contribuyan con su problema. Seguido a esto, el especialista examina al paciente para identificar cualquier anormalidad física. Se practica un defecograma, el cual es un estudio usado comúnmente para demostrar el problema funcional en una persona con disfunción del piso pélvico. Durante este estudio, se le da al paciente un enema de un líquido espeso que puede ser detectado mediante rayos X. Un video de rayos X especial graba el movimiento de los músculos del piso pélvico y del recto mientras que el individuo trata de vaciar el líquido del recto. Normalmente, el piso pélvico se relaja permitiendo al recto rectificarse y al líquido salir del recto. Este estudio demuestra si los músculos del piso pélvico no se están relajando adecuadamente, evitando así el paso del líquido.
El defecograma también es útil para mostrar si el recto se está enrollando en sí mismo (prolapso rectal). Muchas mujeres tienen salida del recto por la vagina, conocida como “rectocele”. Generalmente un rectocele no afecta el paso de las heces. Sin embargo, en algunas instancias, las heces pueden quedar atrapadas en un rectocele causando síntomas de evacuación incompleta. El defecograma ayuda a identificar si el líquido se está quedando atrapado en un rectocele cuando el individuo trata de vaciar el recto.
¿CÓMO SE TRATA LA DISFUNCIÓN DEL PISO PÉLVICO?
La disfunción del piso pélvico, dada la no-relajación de los músculos del piso pélvico, puede ser tratada con terapia física especializada conocida como “biofeedback”. Con ésta, una terapista ayuda a mejorar la sensación rectal de la persona y la coordinación muscular del piso pélvico. Hay varias técnicas efectivas utilizadas en la terapia “biofeedback”. Algunos terapistas entrenan a los pacientes enseñándoles a expulsar un globo pequeño colocado en el recto.
Otra técnica utiliza una pequeña sonda o catéter colocada en el recto o en la vagina o electrodos en la superficie de la piel alrededor del ano y en la pared abdominal. Estos instrumentos detectan cuando un músculo se contrae o se relaja y proporciona información visual de la acción del músculo. Esta visualización ayuda al paciente a entender el movimiento muscular mejorando la coordinación muscular. Aproximadamente 75% de los individuos con disfunción del piso pélvico experimentan una mejoría significativa con la terapia.
Anormalidades identificadas con un defecograma tales como el proplapso rectal y el retocele pueden ser tratados mediante un procedimiento quirúrgico.